Reconocimiento Público


Equipo del sitio

Reconocimiento Público

 

 Tal vez signifique mucho más que la anterior evidencia, el simple hecho de que Jesús, en cierto número de situaciones cruciales en los evangelios, actúa como un soberano, y lo hace de forma bastante deliberada. Uno de los ejemplos más evidentes es su entrada triunfal en Jerusalén montando un asno. Los estudiosos de la Biblia concuerdan que este incidente - Evidentemente importante en la carrera de Jesús, y calculado para atraer el máximo de atención de entre sus contemporáneos - sirvió para un propósito específico. Cumplir con una profecía del Antiguo Testamento. De hecho, en Mateo 21:4, se hace claro que la procesión fue con la intención de cumplir la profecía en Zacarías 9:9, que predice el advenimiento del Mesías:

 

“...da voces de júbilo, hija de Jerusalén; he aquí tu rey vendrá a ti, justo y salvador, humilde y cabalgando sobre un asno...”

 

 Dada la familiaridad de Jesús con la enseñanza del Antiguo Testamento, hay muy pocas dudas de que él sabía de esta profecía. Y sabiendo esto, es muy difícil que la hubiera cumplido, sin querer, o por “pura coincidencia”. La entrada a Jerusalén solo pudo haberse ejecutado con la calculada intención de ser identificado, especialmente ante el pueblo, con el Mesías esperado, en otras palabras, con el Rey Justo, “El Ungido”.

 

 


 

Artículo anterior Artículo siguiente

Artículos relacionados con Reconocimiento Público

Conociendo a Al-lahIt's a beautiful day